Memorias de una heavy light
Aparentemente el concierto de Guns ´N´Roses en Madrid fue un fracaso, o por lo menos , eso insinua la crítica de cierto periódico que califica a Axl y a su bandita de " dinosaurios en caída libre". He de confesar que el símil en sí me ha hecho mucha gracia porque ,sin esfuerzo, se me aparece en la escena mental Axl luciendo un abonbachado traje de dinosaurio (color verde) de los que lleva medio America en Halloween ,haciendo paracaidismo, y créanme , esa imagen no tiene precio.
La noticia me trajo a la memoria cosas de cuando era jóven...En Chipre de principios de los noventa poca gente de mi edad conocía a los Guns ´N´Roses. Ya mucha menos a Metallica, Nirvana, Iron Maiden, Alice in Chains, Judas Priest etc... En aquellos tiempos tenía hermano mayor y un poco más adolescente que yo ,que cursaba en la escuela inglesa, que entonces era la cuna de lo cool y lo..¨."novedoso". Y éste trabó amistades con un chico que era "heavy" y que a menudo invitabamos a casa para comer. Es que el chico heavy era fruta de una pareja divorciada y mi madre, que lo veía con sus camisetas de calaveras , sange y sesos, se empeñaba en que "el pobre necesita calor familiar". Así que comer espaguetis a la boloñesa o filetes rusos con "MMMMaster of puppets i´m pulling your striiiiiings, twiiiisting your mind and smashing your drreaaams" sonando desde el salón se convirtió en algo normal y corriente en nuestro hogar dulce hogar.
Al principio la música esa me parecía ruido puro, pero claro, nunca lo confesé abiertamente porque ,como era de esperar, ya me había enamorado de mi primer heavy.Pero poco a poco, y dado que la otra opción era "Pleaaase forgive me " y fiestas eternas donde se bailaban "slows", opté por convertirme en una versión light de heavy. Así que a los 13 años, posiblemente los peores años de mi vida en cuanto a mi aspecto físico , y mientras mis compañeras de clase bailaban "slows" ,yo seguía anhelosa los pasos de los heavies, y como cabrita autentica que era, a mi hermano y a su amigo (mi amor platónico) a los conciertos rockeros . La sala de ceremonias de la escuela inglesa fue mi nidito - o mejor dicho mi escondite- durante mis años bárbaros. Allí fue dónde llegaron a mis oidos los primeros ruidos producidos por los míticos Dephteria, el grupito del amigo heavy de mi hermano y allí vi como el cantante de un tal grupo llamado GodBlood se autolesionaba en el escenario cortándose con no sé qué, mientras vociferaba gritos incomprensibles. Así pasé dos años siendo una heavy light, haciendo head bagging (pero confieso que nunca stage diving) en vez de ligar con mis compañeros de clase que no querían bailar "slows" conmigo, porque tenía el pelo corto y rizado a la vez (Cágate!) y estaba un pelín hinchada, debido a las cortisonas que me tomaba a causa de una urticaria que me tapaba casi todo el cuerpo.
Al cabo de los dos años la urticaria se curó y el pelo se me volvió a crecer y cuando, tras unas vacaciones de verano, abrieron los colegios me di cuenta de que en la bolsa de los pichitas mis acciones habían subido y que los mismisimos guarros que durante el año anterior me llamaban "patapufa" (una muñeca de lo más feo con unos pelos imposibles, en la que seguramente mi peluquiero se inspiró antes de cortarme el pelo) ahora querían cogerme de la mano e invitarme a polos de limón y fresa . Yo ya estaba en la etapa final del largo proceso de aceptar que mi amor platónico heavy no estaba ni en lo mínimo interesado por mi, es mas, me veía como "su hermanita pequeña" (joddddeeeerrr) , así que me dejé llevar. De vez en cuando, chupando mi polo de fresa, coreaba inconscientemente " obey your Master, Master" pero en fin...vendí el alma al diablo y acabé bailando mi primer slow.
El heavy metal y los heavies en general no florecieron en Chipre como en otros lugares, por razones que no sé -¿o sí?- explicar. Todos los que nos considerabamos fans vendimos el alma por alguna que otra razón...El ejemplo más triste fue el año pasado, cuando después de tres meses de clases, me di cuenta de que el que tenía enfrente ,sudando la gota gorda para que aprendiera el verbo "ser ", era al (segundo) cantante de GodBlood que actualmente es aquel alumno que me manda orquideas para mi cumple y gardenias para mi santo...
La noticia me trajo a la memoria cosas de cuando era jóven...En Chipre de principios de los noventa poca gente de mi edad conocía a los Guns ´N´Roses. Ya mucha menos a Metallica, Nirvana, Iron Maiden, Alice in Chains, Judas Priest etc... En aquellos tiempos tenía hermano mayor y un poco más adolescente que yo ,que cursaba en la escuela inglesa, que entonces era la cuna de lo cool y lo..¨."novedoso". Y éste trabó amistades con un chico que era "heavy" y que a menudo invitabamos a casa para comer. Es que el chico heavy era fruta de una pareja divorciada y mi madre, que lo veía con sus camisetas de calaveras , sange y sesos, se empeñaba en que "el pobre necesita calor familiar". Así que comer espaguetis a la boloñesa o filetes rusos con "MMMMaster of puppets i´m pulling your striiiiiings, twiiiisting your mind and smashing your drreaaams" sonando desde el salón se convirtió en algo normal y corriente en nuestro hogar dulce hogar.
Al principio la música esa me parecía ruido puro, pero claro, nunca lo confesé abiertamente porque ,como era de esperar, ya me había enamorado de mi primer heavy.Pero poco a poco, y dado que la otra opción era "Pleaaase forgive me " y fiestas eternas donde se bailaban "slows", opté por convertirme en una versión light de heavy. Así que a los 13 años, posiblemente los peores años de mi vida en cuanto a mi aspecto físico , y mientras mis compañeras de clase bailaban "slows" ,yo seguía anhelosa los pasos de los heavies, y como cabrita autentica que era, a mi hermano y a su amigo (mi amor platónico) a los conciertos rockeros . La sala de ceremonias de la escuela inglesa fue mi nidito - o mejor dicho mi escondite- durante mis años bárbaros. Allí fue dónde llegaron a mis oidos los primeros ruidos producidos por los míticos Dephteria, el grupito del amigo heavy de mi hermano y allí vi como el cantante de un tal grupo llamado GodBlood se autolesionaba en el escenario cortándose con no sé qué, mientras vociferaba gritos incomprensibles. Así pasé dos años siendo una heavy light, haciendo head bagging (pero confieso que nunca stage diving) en vez de ligar con mis compañeros de clase que no querían bailar "slows" conmigo, porque tenía el pelo corto y rizado a la vez (Cágate!) y estaba un pelín hinchada, debido a las cortisonas que me tomaba a causa de una urticaria que me tapaba casi todo el cuerpo.
Al cabo de los dos años la urticaria se curó y el pelo se me volvió a crecer y cuando, tras unas vacaciones de verano, abrieron los colegios me di cuenta de que en la bolsa de los pichitas mis acciones habían subido y que los mismisimos guarros que durante el año anterior me llamaban "patapufa" (una muñeca de lo más feo con unos pelos imposibles, en la que seguramente mi peluquiero se inspiró antes de cortarme el pelo) ahora querían cogerme de la mano e invitarme a polos de limón y fresa . Yo ya estaba en la etapa final del largo proceso de aceptar que mi amor platónico heavy no estaba ni en lo mínimo interesado por mi, es mas, me veía como "su hermanita pequeña" (joddddeeeerrr) , así que me dejé llevar. De vez en cuando, chupando mi polo de fresa, coreaba inconscientemente " obey your Master, Master" pero en fin...vendí el alma al diablo y acabé bailando mi primer slow.
El heavy metal y los heavies en general no florecieron en Chipre como en otros lugares, por razones que no sé -¿o sí?- explicar. Todos los que nos considerabamos fans vendimos el alma por alguna que otra razón...El ejemplo más triste fue el año pasado, cuando después de tres meses de clases, me di cuenta de que el que tenía enfrente ,sudando la gota gorda para que aprendiera el verbo "ser ", era al (segundo) cantante de GodBlood que actualmente es aquel alumno que me manda orquideas para mi cumple y gardenias para mi santo...
posted by Andrea at 10:10 AM
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